LA IDENTIDAD MEXICANA.

POR. CIMAZ

A propósito de las fiestas patrias, que lamentablemente este año se han visto empañadas por la situación de la Pandemia Mundial del COVID-19, cabe hacer una reflexión sobre la identidad mexicana, ya que México se formó de una sociedad pluricultural y de raíces heterogéneas, por lo que amalgamarlas en el País que hoy somos, fue un proceso áspero y largo que trataré de resumir al margen de cualquier consideración Política.

Una vez que México obtuvo su Independencia a partir de 1810, el país sufrió una serie de convulsiones sociales internas que frenaron su desarrollo y lo sumieron en el caos. Cómo ejemplos, pueden citarse algunos eventos principales de esta época: La búsqueda de una forma de Gobierno definida entre republicanos e imperialistas que llevo a proclamar emperador a Agustín de Iturbide como “Agustín I”, el Plan de “Casa Mata” en breve exigió la restauración del congreso y asumió el poder como primer presidente de México Guadalupe Victoria, fue en Enero de 1824 que por vez primera en un acta quedo establecido el nombre de “Estados Unidos Mexicanos”.

Posteriormente se dan las luchas entre liberales y conservadores por imponer un estilo definido de la política nacional. Las intervenciones extranjeras por parte de Inglaterra, España y Francia en 1838-1839

Y de los Estados Unidos de 1845-1847, encontraron un México desintegrado y aun así podemos citar pasajes de heroísmo que hoy son parte de nuestra identidad.

Fue hasta 1867 con el fusilamiento de Maximiliano de Habsurgo y la consolidación de Benito Juárez en el ejecutivo, que México pudo al fin ver los inicios de su identidad Nacionalista con la aplicación de la Constitución de 1857 y en especial las leyes de reforma que representaban el ideal político de Sebastián Lerdo de Tejada., Pero estos hechos habían dejado al territorio Nacional con menos de la mitad de su territorio original o sea, 1,972,546 Km², divididos en 19 estados, 4 territorios y 1 Distrito federal.

A este periodo le sucede una estabilidad relativa “El Porfiriato”, que si bien a sido cuestionado y denostado históricamente, también considero que fue en ese momento una necesidad,  ya que al carecer de identidad nacional se anteponían los intereses personales o de grupo sobre los del propio país, por lo tanto se debe a este periodo la consolidación de esa identidad nacional.

Sin duda el también oaxaqueño General Porfirio Díaz Mori, entendió las necesidades sociales de la época ya que fue en este periodo (1876-1911), que se fomentaron por vez primera los eventos cívicos que a la vez resaltaban hechos de la historia Nacional, su carácter condescendiente ante los aspectos religiosos, incluso pasando por alto reglas que los oprimían plasmados en la constitución de 1857; el fortalecimiento de los lazos con potencias Europeas logrando exportar la mexicanidad y permitiendo al interior notar y exaltar las diferencias; el florecimiento de las vías y medios de comunicación que permitieron enlazar las distintas regiones del país; la acertada reunión en el gabinete presidencial de actores que representaban a los distintos grupos sociales del país; etc. Entre otros, son aspectos que lograron consolidar un identidad Nacional definida, sin que por esto sea menos importante resaltar aspectos de identificación regional que también florecen en esas epocas por ejemplo: la tradición charra del bajío, la gastronomía Oaxaqueña, el empoderamiento de la historia indígena de los diversos reductos poscoloniales, etc.

Con la Revolución Mexicana 1911-1920, México logró por fin un rumbo político democrático basado en el postulado Maderista de “No reelección”, pero sobre todo se logró un  sentimiento patrio generalizado mismo que fue plasmado en la Constitución Política de 1917, la cual se caracterizó por ser en su momento de las más avanzadas del mundo en cuanto a su con tenido social, las partes dogmática y orgánica sentaron las bases para el desarrollo unificado de nuestra nación, sentimiento que se aglutino en el Partido Nacional Revolucionario (PNR).

Existen además otros factores que contribuyeron de manera no menos importante, por ejemplo la aportación de José Vasconcelos en sus esfuerzos por extender y ampliar la educación a nivel Nacional, la cual se basó desde sus inicios en el fomento del sentimiento Patrio.

La política de Lázaro Cárdenas del Río contribuyó de manera decisiva con la expropiación petrolera y el reparto agrario.

La segunda Guerra mundial trajo a México un periodo de bonanza económica y genero ajustes internos para acelerar la producción consolidando la industria del Norte del País.

De manera cronológica siguieron eventos de connotación nacional, en 1946 fue electo el primer presidente de la República que no provenía del Ejército Miguel Alemán, en 1955 se logra el voto de la Mujer, México tuvo un partido de estado que gobernó en lo general por 70 años logrando con esa continuidad una política más o menos homogénea que sin duda cerro los candados de nuestra identidad nacional.

Hoy México es culturalmente, un digno representante a nivel mundial, se le reconoce su identidad peculiar, su estilo propio, pero sobre todo se destaca el amor que los mexicanos sentimos por nuestra patria. Que sirvan estas fechas para sentirnos orgullosos de nuestro pasado, vigorosos en nuestro presente y prominentes en nuestro futuro. “Viva México”